Elegir el tipo correcto de autoclave es crucial para garantizar la esterilización eficiente y segura de los materiales en tu laboratorio. Los autoclaves de vapor a presión son una opción versátil y confiable, mientras que los autoclaves de baja temperatura y de vacío están pensados para aplicaciones específicas.
Tipos de autoclaves
Autoclaves de vapor a presión
Los autoclaves de vapor a presión son los más comunes en los laboratorios. Utilizan vapor saturado a alta presión para esterilizar el material. Estos autoclaves son versátiles y pueden manejar una amplia gama de productos, desde instrumentos quirúrgicos hasta medios de cultivo y material biológico. Son ideales para aplicaciones en laboratorios médicos, clínicos y de investigación.
Autoclaves de baja temperatura
Los autoclaves de baja temperatura son una opción preferida cuando se requiere esterilización sensible al calor. Utilizan productos químicos como óxido de etileno o peróxido de hidrógeno para eliminar los microorganismos. Estos autoclaves son adecuados para materiales termosensibles como plásticos, dispositivos electrónicos y materiales biológicos delicados.
Autoclaves de vacío
Los autoclaves de vacío eliminan el aire presente en la cámara antes de iniciar el ciclo de esterilización. Al crear un ambiente de vacío, se logra una mejor penetración del vapor y una mayor eficiencia de esterilización. Estos autoclaves son ideales para productos con carga hueca, como pipetas, frascos y jeringas, asegurando una esterilización completa incluso en las áreas más difíciles de alcanzar.
Autoclaves de carga frontal o superior
La diferencia principal entre estos tipos de autoclaves radica en la forma en que se cargan. Los autoclaves de carga frontal tienen una puerta en la parte delantera, permitiendo una carga y descarga sencilla. Son adecuados para laboratorios con espacio limitado y facilitan el acceso a los productos esterilizados. Por otro lado, los autoclaves de carga superior tienen una puerta en la parte superior y son más grandes en tamaño, lo que los hace ideales para cargas pesadas o voluminosas.
Autoclaves de laboratorio de mesa
Estos autoclaves son compactos y diseñados específicamente para su uso en bancos de laboratorio. Son ideales para laboratorios con espacio limitado o para aplicaciones que requieren una esterilización rápida y conveniente. Son fáciles de usar y suelen tener ciclos de esterilización más cortos, lo que los hace perfectos para entornos de trabajo de ritmo rápido.
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Los autoclaves verticales DAIHAN presentan características distintivas que los hacen destacar en el mercado. Estos equipos cuentan con una carga superior y una puerta deslizante, facilitando su uso y acceso. Además, incorporan un microprocesador de última generación para el control preciso de la temperatura, pudiendo alcanzar hasta 132ºC.
Un aspecto fundamental de los autoclaves DAIHAN de Noxair es su enfoque en la seguridad. Cumplen con los estándares de presostato exigidos por las normativas correspondientes y disponen de un manómetro analógico para indicar la presión de manera clara y confiable. Asimismo, se han diseñado con un sistema de condensación de vapor patentado, que brinda una protección adicional al usuario.
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